martes, enero 23, 2007

Recuerdos

Resulta que hoy estabamos en la facultad, puesto que estoy cursando el intersemestral de Matemáticas Financieras, entonces ibamos caminando (Ivan, Lara y yo) y me senti terriblemente triste, como cuando García Márquez escribe que uno cae en esas trampas de la memoria, pues me pasó igual, volví a mirar el cesped verde como alfombra y los árboles altos y viejos de invierno y la luz crepúscular de la tarde y respiré el viento frío impreganado con el aroma de la madera y las hojas, miré el camino de asfalto, las nubes altas resplandecientes con los últimos rayos del sol, y me acordé de ella. Es como saber que voluntariamente uno cae en un abismo, o en un camino sin retorno. Pero descubrí dos cosas, la primera, que hace tanto no escribo, o mejor dicho, no quiero escribir, para no enfrentarme con mis recuerdos. Y la segunda, que pienso que de eso se trata todo, de no acordarse de nada, no puedo decir que durante los ultimos meses he sido feliz, pero al menos ya no me atormenta el pasado y eso de algún modo está bien. Todo se trata de no dejarse sorprender por los recuerdos.