Princesa de las horas
Lunes 2 de Julio de 2007 Huatulco, Oaxaca
“Ella le pidió que la llevara al fin del mundo,
el puso a su nombre todas las olas del mar”
- Joaquín Sabina. -
Es verdad. Nos robaron todas las palabras,
todas las promesas sobre las olas,
todos los sonidos sobre la espuma.
En otro tiempo tu corazón: milagro de las horas,
fue devorado por abismos
donde habitan lobos y serpientes.
Y aprendiste a volar con alas rotas,
y a caminar con medio corazón.
Ya sé que estas son las cosas
que no deben repetirse,
que tus ojos tristes
dicen más que mis palabras,
que tu mano tiembla en mi mano
cuando a tu memoria
acuden las sombras.
Hubo un tiempo en que yo no te tocaba,
en que cada palabra y sonido y mirada, se apagaba.
Conocimos el silencio de las voces
y deje de creer en las palabras.
A veces me pregunto si en verdad eres tú,
o solo uno de esos sueños
que me dicen que regresas.
Han pasado dieciocho años dese esos versos, la perimera cez en que hice un viaje con mis amigos a la ciudad de Oaxaca, como todas las cosas de ese entonces (aunque también las de ahora) eran maravillosas.
A veces no sé porque escribo esas y estas cosas, recuerdo que empece a escribir las cosas que me importaban por dos razones: mi maestra de historía nos dijo que loque nos hace diferentes de los animales es la palabra, la capacidad de transmitir nuestras ideas de modo hablado (creo que tenía y tiene razón), la segunda razón es que me encontraba "enamorado" de mi maestra de biologia y queria decirle "cuanto" la amaba. Por esas razones descubrí que el mejor modo de decir lo que pienso y siento es a través de las palabras. Después descubrí que las palabras eran insuficientes o ineficases. También descubrí que las palabras necesitan muchas veces de otras cosas, como música o sonidos y que en general todas esas "expresiones" se pueden llamar arte: cine, pintura, literatura, danza, cine, etc. son una manifestación de lo que somos nosotros mismos. Años después conocí a Karnain, quien me dijo cuál es, desde su punto de vista el significado del arte: "Es un puente que une los sentidos y ese más allá que no tiene nombre..." por ese entonces descubrí (también gracias a Karnain) que eso que el llamaba arte, era un vículo, según lo que escribe Carlos Castaneda: una liga entre el Tonal y el Nahual.
Por eso escribo. Ahora me doy cuenta que en realidad escribo para mi. No creo que nadie más lea lo que escribo y aunque lo hicieran, ahora sé que quizá no lo puedan entender. No es que no hablemos el mismo idioma, sino que como escribió Ernesto Sabato en el tunel, Juan Pablo Castel sentía que sólo Maria Iribarne pudo entnder ese pequeño gesto que él había pitado en su cuadro. Hay pocas veces que esos sucede. Pienso, incluso, que Juan Pablo Castel percibió que Maria lo podia entender, pero eso es algo de lo que nadie puede estar seguro.