Hay más que las palabras dentro de las palabras,
hay más que horas dentro de las manecillas
del reloj viejo.
Hay mentiras que ni siquiera tienen nombre
y sombras arrastrándose por la noche
de esta ciudad sin Dios.
Ya no sé lo que eres, ni siquiera te odio,
odiarte es como aceptar que respiras
y que vives y que caminas
y que tu corazón late con la posibilidad
de arrepentirte.
Ahora entiendo a Salomé cuando pidió
la cabeza del Bautista.
Perdónala señor, porque, quizá,
no sabía lo que hacía.
Hay más en una habitación de hotel
que en todas tus palabras.
No, ni siquiera pienses que te escribo esto
cava con tus propias manos tu tumba.
Dices bien, lo has perdido todo,
pero nada poseías, eran solo sombras
todo en ti es una mentira.
Hay más que palabras,
hay mucho más que tu.
sábado, septiembre 27, 2008
jueves, septiembre 25, 2008
28
Llegué, no sé si bien o mal, pero llegué. Me alegro de todo lo que tengo en mi vida, y me arrepiento de todo lo que me debo arrepentir. Miro hacía adelante con todas las cosas que he dejado atrás, cosas buenas y cosas, como toda persona supongo. Me alegra tener los amigos que tengo, me alegra haber amado como he amado. Me alegra esperar lo que venga de la vida, me alegra saber que aún puedo aprender muchas cosas, me alegra recordar que las cosas no son fáciles y que debemos luchar por lo que queremos. Estoy orgulloso se haber vivido estos últimos diez años, han sido diez años de vida, de mi vida y con todo, con las cosas buenas, con las cosas malas, con todo, agradezco a Dios que me haya permitido vivirlos.
No tengo palabras para agradecer a quienes los han vivido a mi lado, a quienes han creido en mi, a quienes me han amado, a quienes me han defraudado.
y como dijera un buen critico de cine "por allí nos encontraremos"
y como dijera un buen critico de cine "por allí nos encontraremos"
domingo, septiembre 14, 2008
Clarividencia
Por otra parte, quisiera contar que hace poco falleció mi abuela, y no sé que contar al respecto, es decir, llevaba cerca de cuatro años de sufrir terribles enfermedades: cancer, diabetes, bronquitis, etc. y su agonia fue larga y dolorosa, los últimos días cuando los doctores nos dijeron que no había nada que hacer, esperamos, y es terrible esperar a que muera alguien, porque nadie te dice ni te enseña como debes sentirte ni qué hacer, ni qué decir. Pero lo que me sorprendió en verdad es que cuando falleció, mientras la velabamos en su casa, no me sentia triste, sino alviado, aliviado de no verla sufrir por más tiempo. Recuerdo las palabras de Mika Waltari: "...Sino que para mí la muerte es como un largo sueño, como una noche fresca después de una jornada bochornosa. La vida es como una ceniza caliente y la muerte es una onda fresca. En la muerte cierras los ojos y no vuelves a abrirlos; en la muerte tu corazón se calla y no vuelve a gemir; en la muerte tus manos se agotan y no arden en deseos de obrar; en la muerte tus pies se inmovilizan y no aspiran más que el polvo en las rutas infinitas."
Espero volverla a ver, mi abuela era parte de una epoca de mi vida que en verdad me gusto vivir, recuerdo muchas cosas de ella, por ejemplo la recuerdo haciendo gelatinas y la recuerdo leyendo silaba por silaba y escribiendo lentamente su nombre porque termino la primaria hasta despues de los cincuenta años, la recuerdo pidiendome que ensartara el hilo dentro del ojo de una aguja de su vieja maquina de coser, en fin, hasta siempre abuela.
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